Un informe de Trabajando.com junto a la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) analizó el comportamiento de la oferta y demanda por empleo. Las cifras de postulaciones revelan que ha habido un retiro de trabajadores migrantes del mercado formal. Enlace
El mercado laboral se ha ralentizado. Una señal de aquello es que los inmigrantes ocupados bajaron del millón y ahora en el trimestre julio- septiembre de 2023 suman 996.591. De ese total 308.317 son informales.
De hecho, al trimestre julio-septiembre 2023 la tasa de ocupación informal entre ocupados de nacionalidad extranjera se ubicó en 30,9%, lo que implica un aumento de 1,2 puntos porcentuales respecto al 29,7% registrado hace un año, en julio-septiembre 2022. El alza anual de la tasa de ocupación informal de extranjeros se debe a que, en este segmento, el empleo formal creció sólo 1% anual al trimestre julio-septiembre 2023, mientras que el empleo informal se expandió al 7% anual.
Un reflejo del aumento de la informalidad laboral es que las postulaciones de migrantes a empleos a través de plataformas han ido disminuyendo sostenidamente.
De acuerdo con un análisis de Trabajando.com y la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) si en el primer trimestre de 2019, el 1,6% de las postulaciones eran de migrantes, ese porcentaje cae a 0,6% a fines de 2020, a 0,5% en diciembre de 2021, a 0,4% a fines de 2022 y a tan sólo 0,3% en octubre de este año.
El gerente de estudios de CCS, George Lever, explica que "el aumento de la informalidad en el segmento migrante es posiblemente una de las principales razones". En ese sentido, sostiene que "antes de la pandemia el INE estimaba en 23% la tasa de informalidad entre los ocupados migrantes, muy por debajo de la media de los trabajadores nacionales. A partir de entonces esa tasa ha aumentado aceleradamente pasando por encima de la informalidad de los trabajadores locales".
Es decir, las cifras de postulaciones revelan que ha habido un retiro de trabajadores migrantes del mercado formal.
Según detalla el informe, por nacionalidad, los últimos años Venezuela ha liderado la fuerza laboral migrante que participa de las vacantes publicadas. En 2019 representaba el 87% del total de postulantes extranjeros, al año siguiente anotó un punto adicional de participación. Sin embargo, a partir de entonces, se muestra una disminución hasta el 81% promedio en lo que va de 2023. "Este repliegue se explica principalmente por una mayor presencia de migrantes colombianos, que pasaron del 6% del total en 2021 al 9% este año", subraya el análisis.
En el tercer lugar de origen se ubica Perú, que mantiene una participación de entre 3% y 4% en el período analizado.
En cuanto a los rangos etarios de los postulantes migrantes, se observa un aumento del segmento de entre 30 y 40 años a través del tiempo, pasando del 48% del total en 2019 al 58% este año.
El segmento de entre 40 y 50 años, en contrapartida, disminuye desde un tercio del total al 28% en igual período.
A nivel de calificación, en octubre de este año, el 77% presenta educación universitaria completa, 10% posgrado,9% técnico profesional y 3% educación básica o media. Si se compara con 2019, el 69% tenía educación universitaria completa; 13%, posgrado; 13%, técnico profesional, y 4% tenía educación básica y media.
Respecto de los sectores a los que postulan los migrantes, el 27% lo hace a vacantes en el comercio, con una trayectoria relativamente estable. En segundo lugar, muy cercano, la industria manufacturera concentra el 26% de las postulaciones. Les siguen la agricultura (23%) y a gran distancia los servicios financieros y de seguros (6%).
Expectativas de remunaraciones
El estudio también muestra la evolución y comparación de las pretensiones de ingresos. Así, se muestra que entre 2019 y 2021 se observó consistentemente una brecha entre las aspiraciones salariales de postulantes nacionales en relación a los migrantes.
Por ejemplo, entre esos años, la aspiración de renta promedio de los postulantes nacionales alcanzaba rangos entre $910 mil y $960 mil, mientras que la de migrantes no superaba los $840 mil.
Luego, en 2021 sube para ambos segmentos: supera el millón de pesos para nacionales y los $900 mil para migrantes, pero se mantiene de ese modo la brecha.
Ahora bien, en los últimos dos años, la relación se revierte, llegando a una aspiración salarial cercana a los $970 mil para migrantes y cayendo a menos de $840 mil en promedio para postulantes nacionales. "La diferencia en el comportamiento se podría relacionar a una mayor calificación de la mano de obra migrante que se mantiene en el mercado formal versus los que se retiran hacia el informal", puntualiza el informe.
Para Lever, una explicación de esta baja demanda de trabajadores migrantes que buscan empleo podría ser transitoria, lo que que tendría que ver "con una contingencia compleja en el mercado laboral, con menor generación de puestos formales, lo que tiende a perjudicar con mayor intensidad a los segmentos más vulnerables. La situación de irregularidad de una parte de los nuevos migrantes es un factor que potencia esta tendencia".
A nivel global, la cantidad de vacantes publicadas disminuyó en 33% anual en el trimestre móvil terminado en octubre. Respecto del mes previo, no obstante, se registró un incremento del 8%.
En ese escenario se menciona que, si bien las vacantes se siguen contrayendo en 12 meses, "las tasas a las que lo hacen, pese a ser aún elevadas, van en disminución", afirma el informe.
Las postulaciones, por su parte, cayeron en 19% en 12 meses y en 6% respecto del mes anterior.
Comments